El desarrollo de las habilidades motrices, es de vital importancia en los seres humanos, desde muy temprana edad, ya que le permite desarrollar su parte cognitiva, afectiva y emocional. Brindándole seguridad, al momento de realizar sus actividades. La motricidad se la adquiere mediante destrezas tales como: el juego, movimientos,curiosidad, actividades que contribuyan al ejercicio del proceso de enseñanza-aprendizaje.
Existen dos motricidades fina y gruesa:
La motricidad fina comprende es ejercer movimientos y destrezas en las manos, dedos brazos y pies. La motricidad gruesa se basa en el crecimiento cronológico del niño/a, enfocando prácticamente en su cuerpo y en sus habilidades psicomotrices.